DGSPC conmemora aniversario de Ley que regula el Sistema Penitenciario con ofrenda floral en el Altar de la Patria

Con una ofrenda floral ante los Padres de la Patria, la Dirección General de Servicios Penitenciarios y Correccionales, (DGSPC) conmemoró el segundo aniversario de la entrada en vigencia de la Ley 113-21, que regula el Sistema Penitenciario en la República Dominicana.

El homenaje a los patricios es el inicio de un programa de actividades conmemorativas, que incluyen un acto religioso y reconocimiento a empleados meritorios.

Roberto Hernández Basilio, director general de la Dirección de Servicios Penitenciarios y Correccionales, acompañado de funcionarios y colaboradores de esa dependencia de la Procuraduría General de la República, luego de depositar la ofrenda, destacó que la institución que dirige está comprometida con generar las acciones que lleven a cumplir con los objetivos que establece la Ley 113-21, sobre Régimen Penitenciario, de devolver a la sociedad a hombres y mujeres reeducados, productivos y con valores.

“Que sepa el país que los hombres y mujeres de la DGSPC trabajamos sin descanso para cumplir con nuestra misión de reinsertar a los privados de libertad a la sociedad, colaborando con el Estado Dominicano para garantizar la seguridad de la población y sin menoscabo de los Derechos Humanos de quienes custodiamos”, dijo Hernández Basilio.

La Ley 113-21, del 20 de abril del año 2021, sobre régimen penitenciario, que derogó a la 224-84, entre otros mandatos sustituyó el nombre de Dirección General de Prisiones por el de Dirección General de Servicios Penitenciarios y Correccionales (DGSPC).

Tiene como objeto, ámbito de aplicación y principios, la protección de la integridad y dignidad de las personas privadas de libertad; la reducción de las consecuencias negativas de su estado, así como la corrección, reeducación y reinserción en la sociedad, mediante un mecanismo de control que ayude a evitar la reincidencia.

Entre los principios generales de la Ley, figuran, la no discriminación, la dignidad humana, la libertad religiosa y cultural, la defensa del debido proceso y la participación comunitaria, entre otros.