Senadores republicanos radicalizan bloqueo contra la dominicana Julissa Reynoso como embajadora en España acusándola de castrista y comunista

Miguel Cruz Tejada

NUEVA YORK._ Varios senadores republicanos liderados por el cubano americano
Marcos Rubio de Florida, están radicalizando sus argumentos para mantener el bloqueo
contra la designación de la abogada dominicana Julissa Reynoso quien se desempeñó
en el mismo cargo diplomático en Uruguay durante el Gobierno de Barack Obama y
recientemente jefa del gabinete de la primera dama Jill Biden, acusándola de castrista y
comunista.
Julissa, fue subsecretaria del Departamento de Estado para el Hemisferio Occidental que
incluye América Latina y el Caribe donde brilló por una encomiable labor también en la
administración Obama.
La dominicana, graduada en varias de las universidades más prestigiosas del mundo, se
ha ganado el respeto y la admiración del liderazgo nacional demócrata, la diáspora
dominicana y hasta ahora no había sido desconsiderada ni calumniada por ningún sector
político incluyendo a los republicanos.
Rubio también cuestiona el nombramiento de Nicholas Burns como embajador en
China, posición que está retrasando el esquema diplomático del Gobierno en
Washington.
Ante las críticas por su oposición, el legislador hijo de cubanos exiliados en Miami y
nacido y criado en Florida, está radicalizando su decisión y auxiliándose de otros
colegas con su mismo nivel de retrograda en las recientes sesiones del senado después
del comunicado divulgado el 16 de este noviembre.
Uno de ellos, es el senador Ted Cruz de Texas.
Rubio dice que Julissa permitiría que España se haga de la vista gorda frente a los
regímenes socialistas en América Latina y que Estados Unidos no puede usarla como
delegada de los dictadores.
“Es una simpatizante y apologista del régimen de Castro”, argumenta Rubio en un
comunicado.
“Reynoso no presionaría a España para que aumente la presión contra los regímenes
autoritarios en Cuba, Nicaragua y Venezuela”, sostiene el senador ultra derechista.

“Posiblemente ella dejaría que España se hiciera de la vista gorda ante esos regímenes.
Estados Unidos necesita a alguien que esté comprometido con la libertad y los derechos
humanos en el continente, no una delegada de los dictadores.
Agregó que Reynoso estuvo implicada en el pasado en ayudar a intercambiar miembros
del servicio de inteligencia del régimen cubano encarcelados mientras cumplían
condena en una prisión estadounidense durante la política de deshielo en la
administración Obama.
“Esto plantea serias dudas sobre el carácter y el juicio de Reynoso”, expresó Rubio
refiriéndose a los tres años (2009-2017) que estuvo Reynoso como la principal
funcionaria del Departamento de Estado para América Latina, manejando las políticas
exteriores de Estados Unidos hacia Cuba durante los llamados años de deshielo.
En la audiencia para considerar la nominación de Reynoso a comienzos de octubre,
varios senadores criticaron al Gobierno del presidente español Pedro Sánchez por
oponerse a la posición de la Casa Blanca contra Cuba.
Encabezados por Rubio, los senadores republicanos presionaron a Reynoso para que
influyera en el Gobierno español sobre temas latinoamericanos.
Rubio es vicepresidente del Comité de Inteligencia del Senado y uno de los miembros
principales del Comité de Relaciones Exteriores de esa cámara.
Para ser confirmada como embajadora en España, la nominación de Reynoso fue
aceptada en una votación de la Comisión de Relaciones Exteriores y en el pleno del
senado.
El bloqueo dirigido por Rubio fuerza a que su nominación no sea sometida a votación
en el pleno mientras se mantiene estancada.
Rubio, Cruz y Josh Hawley de Missouri mantienen el bloqueo la confirmación de
decenas de embajadores, secretarios adjuntos de estado y otros nombramientos de alto
nivel en relaciones exteriores.
En el caso de Burns, se esperaba que recibiera un amplio apoyo bipartidista, incluyendo
el de Cruz.
Burns es una de las figuras permanentes más notorias de la diplomacia estadounidense
que ha trabajado para presidentes demócratas y republicanos.
Se le considera un diplomático con carrera impecable y de gran balance.
"Nicholas Burns tiene una larga carrera en el servicio público, pero es una carrera
definida por la falta de comprensión de la amenaza que representa el Partido Comunista
Chino", dijo Rubio.
Ahora, Rubio es calificado como un “acosador legislativo”.