Jurista Juan Miguel Castillo Pantaleón Analiza los Desafíos de la Convivencia en la Isla Hispaniola

El reconocido jurista y especialista en relaciones dominico-haitianas, Juan Miguel Castillo Pantaleón, abordó los complejos desafíos que enfrenta la República Dominicana en su convivencia con Haití. Castillo Pantaleón destacó la imposibilidad de una solución fácil para los problemas derivados de la situación crítica de Haití, descrito como un estado fallido con niveles alarmantes de subdesarrollo y agotamiento de recursos naturales.

Según Castillo Pantaleón, la situación haitiana ha tenido un impacto directo en la República Dominicana, especialmente en sectores como educación, salud y medio ambiente. El jurista señaló que aproximadamente el 10% de los estudiantes en el sistema educativo dominicano son de origen extranjero, lo que representa un costo significativo para el estado dominicano. Asimismo, resaltó el enorme gasto que implica la atención sanitaria a la población haitiana, mencionando que hospitales en la frontera destinan más del 80% de sus recursos a atender extranjeros.

Castillo Pantaleón argumentó que la única solución viable para la República Dominicana es “poner orden en su casa” y no intentar resolver los problemas de su vecino. Comparó la situación con la de un vecindario donde un hogar desordenado no puede ser arreglado por los vecinos, sino que cada casa debe gestionar sus propios asuntos.

En relación a la administración pública y la reforma fiscal, el jurista criticó la mala gestión y el gasto innecesario del estado dominicano, sugiriendo que antes de considerar una reforma fiscal, se debería revisar cómo se están utilizando los recursos actuales. También mencionó la corrupción como un problema persistente que ha cambiado de forma, pero no ha sido erradicado.

El análisis de Castillo Pantaleón concluye con la necesidad urgente de que el gobierno dominicano revalúe sus políticas y enfoque sus esfuerzos en una gestión eficiente de los recursos, para evitar que los problemas del vecino terminen afectando de manera irreversible a la propia nación.