Julio Hazim y Ramón Santos: Reflexión sobre la economía agrícola y los retos del consumo en República Dominicana
Durante un diálogo que abarcó la realidad del sector agrícola, los hábitos de consumo y las complejidades del mercado dominicano, Julio Hazim y Ramón Santos abordaron cuestiones cruciales relacionadas con la distribución, producción y acceso a bienes en el país.
Hazim destacó las dificultades que enfrentan los dominicanos en la compra de alimentos y bienes básicos debido al poder adquisitivo limitado de muchos sectores de la población. “El dominicano compra lo que puede, no siempre lo que quiere”, señaló, haciendo alusión al contraste entre las aspiraciones de consumo y las restricciones económicas.
Santos, por su parte, enfatizó la importancia del intermediario en la cadena de distribución agrícola, describiéndolo como un “villano necesario”. Argumentó que sin estos actores, sería inviable conectar al productor rural con los mercados urbanos. Además, reflexionó sobre la evolución del consumo, recordando épocas en las que las familias dominicanas podían cultivar alimentos en sus patios, algo que se ha perdido con el crecimiento demográfico y la urbanización.
Ambos coincidieron en que las dinámicas del comercio, como la presencia de productos importados y el acceso desigual a bienes, reflejan las profundas brechas sociales. Hazim mencionó cómo la innovación en los sistemas de venta, desde supermercados hasta colmados, ha permitido ampliar el acceso a productos de calidad, aunque el precio sigue siendo un factor determinante.
En un contexto de economía globalizada, también abordaron cómo la competencia extranjera y las políticas fiscales impactan los mercados locales. Santos ilustró cómo algunos productos importados pueden ser más accesibles que los nacionales debido a la tecnología y la eficiencia de los países exportadores.
Finalmente, destacaron el rol de la innovación empresarial para responder a las necesidades del consumidor dominicano. Mencionaron ejemplos como la creación de paquetes de arroz en pequeñas cantidades, que han ampliado el mercado y permitido que sectores más vulnerables accedan a productos de calidad.

