Julio Hazim denuncia el chantaje como profesión y critica complicidades entre Estado, narcos y redes sociales

Julio Hazim arremetió contra la creciente cultura de chantaje y desinformación en República Dominicana, advirtiendo que “el chantaje se ha convertido en una profesión” amparada por el silencio institucional, la debilidad del liderazgo nacional y la complicidad política.

Hazim cuestionó los acuerdos “oscuros” de la Procuraduría con personas que devolvieron bienes tras alegadas operaciones ilícitas, citando el caso de “tres personas que devolvieron 3 mil millones de pesos” sin que el país conozca los detalles de esos arreglos.

“¿Cuál fue el acuerdo? ¿Quiénes son los abogados que lo supervisan? ¿Por qué quienes antes defendían a narcotraficantes ahora manejan parte del presupuesto nacional y ocupan curules en el Congreso?”, preguntó de forma retórica.

El veterano analista denunció también que múltiples candidaturas congresuales y municipales se han entregado a figuras cuestionadas sin transparencia, mientras que los aspirantes presidenciales —ya sobrepasando los 20— “no han propuesto nada concreto, salvo uno que habló sobre el agua”.

Hazim vinculó esta crisis a un sistema de medios donde “el chantaje digital” florece: personas que acumulan seguidores en redes sociales para traficar con información no verificada, difundir morbo o atacar reputaciones a cambio de beneficios. “Desde una casa, un micrófono y un seudónimo disparan como si fueran del MOSAD, de la CIA o del DNI”, afirmó.

Reclamó que los medios tradicionales, el gobierno, el Congreso y la justicia “mantengan informada a la población con fuentes oficiales”, advirtiendo que “donde hay terreno baldío, cualquiera pone alambre de púas y cerca”.

Hazim lamentó que la República Dominicana carezca hoy de líderes con autoridad moral y voz firme, como lo fueron en su momento el arzobispo Nicolás de Jesús López Rodríguez, Agripino Núñez Collado o Rafael Herrera. “Hoy solo prima el interés personal y partidario. Todos se creen depositarios de la verdad”, denunció.

También cuestionó que el gobierno no admita su falta de recursos. “Aquí no hay cuartos y nadie lo dice. Se dedican a cortar cintas de obras sin concluir y no asumen las carencias estructurales”, subrayó, al tiempo que reiteró que el único sector que exhibe algún nivel de éxito es el de salud, representado en Senasa.

Finalmente, Hazim criticó la política migratoria y sanitaria en la frontera dominico-haitiana, advirtiendo que el sistema no aguanta más. Relató testimonios crudos sobre parturientas haitianas que cruzan la frontera en condiciones precarias y exigió que se asuma el problema con firmeza y sin hipocresías.

“Estamos agarrando el rábano por las hojas. Aquí nadie quiere auditar lo que encuentra porque decir lo que se tiene implica explicar cómo se consiguió. Se proyecta la corrupción como si fuera planificación financiera”, sentenció.

Hazim cerró su intervención exhortando a los nuevos funcionarios a exigir auditorías y rendición de cuentas al recibir sus cargos, advirtiendo que el problema institucional dominicano es más profundo que lo que se ve en la superficie.