Gustavo Güílamo: “El nuevo protocolo migratorio en hospitales implica una estructura que aún no existe”

El experto en seguridad social y analista Gustavo Güílamo advirtió que la implementación del nuevo plan de atención a migrantes ilegales en los hospitales del país, anunciado por el gobierno dominicano, presenta desafíos logísticos, administrativos y presupuestarios que aún no han sido resueltos.

Durante su participación en el programa Revista 110, Güílamo destacó que el plan, aunque ambicioso, requiere la creación de una estructura de fiscalización y facturación hospitalaria que opere las 24 horas del día, los 7 días de la semana, incluyendo la presencia permanente de oficiales migratorios. “¿Quiénes serán esos oficiales, bajo qué perfil, y cómo se garantizará su operatividad en todos los hospitales del país?”, cuestionó.

Según explicó, el protocolo establece que los migrantes ilegales recibirán atención inmediata solo en casos de emergencia, pero que luego deberán ser identificados por Migración y facturados por los insumos utilizados, sin incluir honorarios médicos ni costos de hospitalización. “Estamos hablando de un sistema paralelo de gestión hospitalaria que ni siquiera está consolidado para pacientes con seguro médico”, puntualizó.

Güílamo subrayó que, aunque la medida apunta a reducir la carga sobre el sistema de salud, el costo de aplicarla puede ser mayor que su beneficio si no se estructura adecuadamente. “Habrá que evaluar si el Estado tiene el presupuesto, el personal y la supervisión necesaria para sostener este plan más allá de la coyuntura”, advirtió.

Además, el analista expresó preocupación sobre la limitada cobertura del plan: “Este protocolo solo se está pensando para nacionales haitianos. No hay evidencia de que se aplicará a otras nacionalidades, lo que crea un enfoque selectivo y posiblemente discriminatorio”.

Al referirse al trasfondo del tema migratorio, Güílamo señaló que el gobierno del presidente Luis Abinader ha sido el primero en tomar medidas firmes frente al fenómeno, aunque advirtió que aún hay sectores que se benefician de la migración ilegal y podrían resistir los cambios. “Hay intereses empresariales vinculados a la agricultura, construcción y servicios que deben ser parte del debate si queremos una solución integral”, concluyó.

La propuesta se enmarca dentro del plan nacional de control fronterizo y de regularización hospitalaria, en medio de una creciente presión migratoria y un debate público sobre la sostenibilidad del sistema de salud.