Familia Cedeño Rubini denuncia asociación de malhechores falsifica documentos para despojarlos de propiedades

La familia Cedeño Rubini denunció que una mafia pretende
despojarlos de sus propiedades en Punta Cana, Bávaro, a través de falsificaciones de
contratos de compraventa y de préstamos con garantía hipotecarias falsas, por lo que se
han visto precisados en los últimos 30 días a apoderar a las fiscalías de las provincias La
Altagracia y Santo Domingo de 4 querellas penales con constitución en parte civil por
falsificación de documentos, uso de documentos falsos y asociación de malhechores.
“Esto obedece a la crisis de seguridad jurídica inmobiliaria en esta zona turística de la
región Este, especialmente en Punta Cana y Bávaro, como consecuencia de mafias que se
dedican a la falsificación de documentos de venta o constitutivos de hipotecas irreales,
invasión de propiedades, extorsión a proyectos inmobiliarios y ventas de terrenos que se
encuentran en pleno auge”, explicó Jorge López Hilario, abogado de los afectados en una
rueda de prensa realizada este martes en un restaurante de la Capital.
En el encuentro participaron los hermanos Sybeles, Rejane y Dirlei Cedeño Rubini, en
representación de esa familia.
El abogado López Hilario sostuvo que, gracias a la labor de la Procuraduría Fiscal de La
Altagracia, uno de estos casos fue resuelto, porque el autor de la falsedad reconoció que
el documento fue falsificado y que miembros de una red lo convencieron de usar ese
documento para extorsionar a la familia Cedeño Rubino.
Precisó que la mafia integrada por abogados, notarios públicos, otros sujetos
inescrupulosos falsificaron contratos de supuestas ventas y pagarés notariales para
despojar a esta familia Cedeño Rubini de la parcela número 65-B-10 del Distrito Catastral
11.2, matrícula 3000235090, que tiene una extensión 214,909; y también de la parcela
número 67-B-45 del Distrito Catastral 11.3, matrícula 3000094780, que tiene una
extensión 125,770 metros cuadrados.

Este grupo mafioso se aprovecha del fallecimiento de don Conrado Cedeño en el 2013 y
presentan documentos falsos del 2006 y 2007, sin comprobantes de pago, como un
mecanismo de extorsión y chantaje a Ana María Rubini, quien no reconoce estas ventas y
afirma no conocer a ninguno de los alegados compradores.
López Hilario afirmó que nadie que compre una propiedad de manera legítima espera más
de 17 años para presentar los documentos de las alegadas ventas o pagarés notariales y
reclamar la entrega de los terrenos.
Indicó que la primera propiedad está ubicada en la costa de Cabo Engaño, colindando con
el aeropuerto de Punta Cana y la otra parcela en el centro de Verón, frente al cruce de
Domingo Maíz, ambos pertenecientes al municipio de Higüey, provincia La Altagracia.
El representante legal de la familia Cedeño Rubini manifestó que entre los responsables
de esta situación se encuentran los querellados Ramón Jorge, Luis Homero Díaz Vargas,
Esteban Gregorio Billini Roque, Francisco Teodoro Castillo, Andy Castillo Andújar, Camilo
Mota Contreras, Lorenza Martínez y Félix Vizcaino Soto.
Además, Luisa Sandoval Martínez, Bertinio de la Rosa Aybar, Félix Alburquerque Sánchez,
Ramón Emilio Morel Veliz y Moisés Sánchez Severino.
“A esta mafia inmobiliaria del Este, está presentando a las autoridades documentos falsos,
con firmas adulteradas, que han superado las medidas internas y controles de seguridad
registral, siendo inscritas irregularmente”, aseguró López.
Agregó que las debilidades mostradas por las autoridades judiciales, impositivas y
registrales, generan una crisis de seguridad jurídica y serio cuestionamiento al derecho de
propiedad en la zona del Este.
Señaló que confía en la justicia dominicana y que tanto la jurisdicción inmobiliaria y la
Dirección General de Impuestos Internos (DGII) tomarán las medidas de rigor para dejar
sin efecto cualquier actuación irregular de esta mafia.
Por último, puntualizó además urge que haya una depuración de las operaciones
registrales, que la Procuraduría General de la República desmantelen de una vez para
siempre las bandas mafiosas que tienen secuestrada la seguridad jurídica inmobiliaria en
la zona turística del Este.