Espaillat afirma republicanos opuestos a control de armas tienen sangre en las manos por masacre en Buffalo y otros ataques

Miguel Cruz Tejada

NUEVA YORK._ El congresista dominicano Adriano Espaillat del distrito 13 en Nueva
York, afirmó anoche que los legisladores federales republicanos y estatales que se
oponen a las leyes sobre control de armas, tienen sangre en sus manos por la masacre
del sábado en la tarde en Buffalo (Nueva York) y otros ataques perpetrados por
supremacistas blancos y desquiciados en varios estados de Estados Unidos.
En entrevista con este reportero sobre el tema, Espaillat dijo que sometió un proyecto de
ley que busca estrictas restricciones en las ventas de armas, pero que el bosquejo está
engavetado y saboteado mayoritariamente por legisladores republicanos contrarios a
que se trate al menos de reducir las matanzas que con frecuencia se perpetran en
Estados Unidos y la violencia armada en las ciudades de gran concentración urbana
como Nueva York.
“Ni una más”, respondió al preguntársele cuántas masacres y asesinatos más habrá que
ver para que se logre el control de armas desde el congreso.
“Nosotros, sometimos un paquete de leyes que lograrían eso y que incluyen el proyecto
de ley contra las armas fantasmas que fue aprobado como una orden ejecutiva del
presidente Biden y que yo auspicio”, señaló Espaillat.
Señaló que el paquete incluye eliminar también el acceso a las armas semi automáticas
de guerra y que se hagan chequeos más profundos a los compradores, debido a que en
tres días el FBI no puede hacer un escrutinio completo del récord, y les venden las
armas.
“Lo primero es que nadie debe andar con armas de fuego en las calles sino es
automática, ¿para qué?, y la constitución no protege eso, la enmienda que da derecho a
tener armas se refiere al porte cuando hay gobiernos dictatoriales para protegerse de los
gobiernos que violan los derechos de la ciudanía”, explicó.
“Pero ese no es el caso, se está utilizando el derecho constitucional de portar armas que
terminan en estas masacres como la que se dio en Buffalo el sábado, tenemos el
proyecto y no lo han aprobado”, agregó Espaillat.

Dijo que el senado debió haber aprobado el proyecto de ley, y que Biden está dispuesto
a promulgarlo si se convierte en ley, pero que cuando se habla de republicanos y
demócratas, son los republicanos que están bloqueando ese proyecto.
“Los republicanos tienen sangre en sus manos, la tienen desde la administración de
Trump y todavía la tienen. Son los republicanos los culpables”, exclamó el congresista.
Afirmó que la masacre de Buffalo clasificada como crimen de odio por motivos
raciales, es un componente más severo cuando es motivado por odio.
Recordando la matanza en la escuela Sandy Hook en la ciudad de Newton en
Connecticut en diciembre del 2012, perpetrada por Adam Lanza, de 20 años, quien mató
a 26 víctimas (20 niños) y a seis profesores y empleados administrativos, Espaillat
preguntó ¿qué más horroroso que eso?
“Cada vez más se manifiesta de diferentes maneras y todas son horrorosas. Por tal
razón, todo el mundo debería apoyar la aprobación de un proyecto de ley que impida
que una persona así pueda tener un arma de fuego, aunque eso no quiere decir que no la
van a tener nunca jamás, pero por lo menos con mayores restricciones que puedan
reducir los casos como este (Buffalo)”, añadió.
“Actualmente hay sectores en el congreso de Estados Unidos que están en el bolsillo de
la Asociación Nacional del Rifle (NRA) que hace un lobbismo fuerte para que le den
acceso a las armas de fuego a un gran número de la población norteamericana”, reveló
Espaillat.
Empero, Espaillat descartó la reinstauración de la pena de muerte en Nueva York,
añadiendo que no cree que sea la solución para prevenir que las masacres sucedan.
“Lo que puede prevenir que ese tipo de cosas sucedan es limitar el acceso a las armas de
fuego, porque una persona que esté pensando cometer una matanza no va a decir que no
lo va a hacer por la pena de muerte”, explicó.
“Es una persona que lo hace como quiera si tiene acceso a las armas de fuego, entonces,
yo creo que ese es el tema que debemos debatir”, añadió.
“Yo fundamentalmente estoy en contra de la pena de muerte”, proclamó el congresista.