Yunior Espinosa advierte que el Ministerio Público debe actuar con coherencia y apego al debido proceso
Yunior Espinosa reiteró que uno de los mayores desafíos del país es la construcción de una ciudadanía consciente, capaz de exigir coherencia institucional y respeto al debido proceso. Señaló que, aunque hay críticas constantes al Ministerio Público, la sociedad no puede reclamar acciones y luego cuestionarlas cuando se producen, como ocurrió con el caso SENASA. A su juicio, «no se puede cantar y llorar al mismo tiempo».
Espinosa enfatizó que el debido proceso no es un simple concepto jurídico, sino un principio esencial para proteger los derechos fundamentales. Cuestionó si el Ministerio Público actúa realmente como representante de la sociedad o si, por su rol persecutor, opera guiado más por su teoría del caso que por la búsqueda equilibrada de la verdad, llegando en ocasiones a ocultar pruebas de descargo.
También alertó sobre fallas en el poder legislativo, recordando que múltiples leyes —incluyendo la de partidos, la del DNI y partes del Código Procesal Penal— han sido anuladas total o parcialmente por el Tribunal Constitucional. Atribuyó estas fallas a asesores que no están cumpliendo su función o a legisladores que simplemente no escuchan.
El comentario incluyó una crítica directa a las modificaciones recientes del Código Procesal Penal, aprobadas con prisa por el inminente vencimiento del plazo fijado por el Tribunal Constitucional. Aunque el Poder Ejecutivo defiende la armonización con el nuevo Código Penal, Espinosa recordó que juristas y entidades han señalado preocupaciones sobre garantías y derechos.
Finalmente, expresó preocupación por las renuncias en el equipo de recuperación del patrimonio público, cuyos miembros han pasado de colaborar con el Ministerio Público a defender imputados en casos sensibles. Calificó esta práctica como un problema ético que envía una «muy mala señal» y que, a su juicio, debería ser regulada para evitar ventajas indebidas y preservar la confianza en los procesos anticorrupción.
Espinosa concluyó llamando a fortalecer la ciudadanía, exigir un Ministerio Público más equilibrado y promover instituciones coherentes que garanticen justicia sin atropellos ni improvisaciones.
