Waldy Taveras: “La Zona Colonial se inunda porque redujeron los drenajes y eliminaron los contenes”

El especialista en asuntos municipales Waldy Taveras explicó en La Revista 110 que las recientes inundaciones en la Zona Colonial se deben a errores de diseño urbano introducidos durante la más reciente remodelación, donde se redujo el diámetro de los drenajes pluviales y se eliminaron los contenes tradicionales.

“Trajeron un ingeniero español de Barcelona —donde casi no llueve— que decidió sustituir los contenes y reducir los tubos de drenaje de 18 a 4 pulgadas. Eso fue un desastre. Al llover, el agua no tiene por dónde salir”, denunció.

Taveras recordó que el sistema de drenaje original, diseñado en el siglo XV por Nicolás de Ovando, sigue siendo más eficiente que las obras modernas, ya que estaba compuesto por túneles y galerías subterráneas que conectaban las calles principales con el mar Caribe.

“Ese drenaje todavía existe. Comienza por la iglesia de Santa Bárbara y atraviesa toda la muralla hasta el muelle, pasando por debajo de edificaciones históricas. Fue una obra adelantada a su tiempo”, puntualizó.

Un problema estructural

El analista sostuvo que el problema de las inundaciones urbanas no se limita al casco histórico, sino que afecta también a túneles, pasos a desnivel y avenidas como la George Washington, donde la falta de mantenimiento y limpieza de los desagües agrava la situación.

“Aquí se hacen drenajes sin pensar en el comportamiento de la gente. La basura y los plásticos bloquean las rejillas, y no se limpian con frecuencia. Esos sistemas requieren mantenimiento al menos dos veces por semana”, explicó.

También comparó el malecón de Santo Domingo con el de La Habana, señalando que en Cuba el diseño vial evita inundaciones mediante una leve inclinación del terreno y la ausencia de isletas centrales.

Falta de planificación y ley pendiente

Taveras resaltó que la solución al problema de residuos y drenajes urbanos pasa por aplicar correctamente la Ley de Residuos Sólidos, cuya modificación aún no ha sido promulgada.

“Esa ley es buena, pero tiene un gran problema económico encima. Mientras no se asigne financiamiento suficiente, todo seguirá igual”, advirtió.

Finalmente, propuso recuperar la planificación técnica de la ciudad, mantener los drenajes históricos y reinstalar contenes funcionales, en lugar de continuar con diseños estéticos importados que no responden al clima tropical ni a la realidad urbana de Santo Domingo.