Ramón Hipólito Mejía dice RD debe olvidar idea de no depender de mano de obra extranjera

El empresario Ramón Hipólito Mejía consideró que los dominicanos deben olvidar la idea de que el país no dependerá en algún momento de la mano de obra haitiana masiva en los sectores de la construcción y la agricultura.

El experto en temas agrícolas reconoció que los vecinos haitianos necesitan trabajar para subsistir y los dominicanos han utilizado, quizás hasta con doble moral, la mano de obra barata.

“Olvídate eso, no hay marcha atrás, la agricultura y la construcción requieren de mano de obra haitiana, que busquen la manera de controlarlo, de fiscalizar, pero es muy difícil que el hábito del dominicano vuelva al campo en esos niveles”, expresó.

Mejía habló al respecto al ser entrevistado en el programa “Síntesis con Michael Hazim”, transmitido por la plataforma digital El Nuevo Diario TV, espacio donde resaltó la buena intención del Gobierno para impulsar un amplió programa de mecanización que ayude a disminuir a su mínima expresión la contratación de mano de obra extranjera, sin embargo, entiende que el mismo no tendrá resultado.

Dijo que si en realidad existiera la maquinaria para reducir la mano de obra de forma eficiente el sector privado ya la habría adquirido sin la necesidad de esperar contribución de organismos como el Banco de Desarrollo y Exportaciones (Bandex).

Mejía enfatizó que el mercado haitiano es sumamente importante para la República Dominicana por varios factores, entre ellos, no representa problemas de logística por la cercanía y el país es su suplidor natural.

“Somos un suplidor incluso que le puede preparar un sinnúmero de tipos de productos que ellos necesiten como un salami o un tipo de pasta que se prepare a los precios que ellos pueden pagar”, acotó.

Además, indicó que el 95 % de las ganancias de muchas empresas de la zona fronteriza proviene del comercio informal que se da en la frontera, por lo que es de suma importancia para ellos.

De igual forma, consideró que encontrar mercados sustitutos no es fácil, ya que los más próximos, como las islas del Caribe, tienen suplidores tradicionales con los que habría que competir, e igualmente las grandes naciones.

“Si nosotros no hemos sido capaces de competir en un mercado como el americano que está a tres días en barco de aquí a Miami, ¿tú vas a China a vender piña, como que Tailandia no tiene piña?”, preguntó.

El empresario sostuvo, además, que República Dominicana ha perdido competitividad para exportar, y para entrar en otros mercados habría que hacer un análisis profundo en el que se detecte las debilidades y fortaleza.

Dijo que República Dominicana se ha ido convirtiendo en un país de turismo de servicio y el perfil de que se ha quedado produciendo, salvo algunas excepciones, no ha ido al mismo nivel que el de los grandes exportadores.

Mejía planteó que se empiece a identificar cuáles sectores pueden competir y que necesitan estos para hacer. Por ejemplo, identificar zonas como el Sur profundo, que es bueno para la producción de aguacate y dar incentivos al lugar como 10 o 15 años sin impuestos sobre la renta, tanto para productores locales como extranjeros.

“Yo estoy seguro que ahí se mete gente; tú vas a generar exportaciones, mano de obra, vas a mover la economía de esa zona. Es la única forma de atraer esa inversión extranjera, pero localmente se ha ido perdiendo esa capacidad de competir a grandes ligas de los mercados agrícolas”, sumó.