Inmigración de Canadá impide entrada a reverendo dominicano Salvador Sabino por récord criminal anulado en Estados Unidos

Miguel Cruz Tejada

NUEVA YORK._ Oficiales de la Agencia de Servicios Fronterizos de Canadá (Canada Border Services Agency – CBSA) impidieron la entrada a ese país al célebre reverendo dominicano Salvador Sabino (Sal) por su récord criminal de hace décadas fue anulado recibiendo el perdón del entonces gobernador Andrew Cuomo y se naturalizó ciudadano de los Estados Unidos.

El pastor, viajaba a las Cataratas de Canadá, frontera con la ciudad de Buffalo en Nueva York y Canadá el miércoles 23 de este agosto junto a su esposa, la pastora Kenia Sabino y una pareja de predicadores cristiana a los cuales no se les impidió entrar al país fronterizo.

El incidente se produjo a la 1:00 de la tarde en el puesto de chequeo fronterizo que da acceso a las Cataratas del Niágara punto que visitaría Sabino y sus acompañantes.

El reverendo, fundador y líder de la iglesia “Heavenly Vision Christian Center” con sede en El Bronx, Nueva York permanece en un hotel de Buffalo desde donde habló la noche de ayer jueves con este reportero para explicar su situación.

La agencia migratoria de Canadá advierte en su página web que usted puede ser considerado inadmisible en Canadá (no se le permite ingresar al país) por el oficial de servicios fronterizos por varias razones que incluyen la participación en actividades delictivas como condenas por conducir bajo los efectos del alcohol, violaciones de los derechos humanos, delincuencia organizada, narcotráfico, pandillerismo y otros crímenes.

Sabino dijo que se sorprendió por el impedimento de entrada a Canadá y que está en la frontera aclarando que se transportaba en carro en su esposa y una pareja pastoral y como se trata de un cruce internacional, hay que mostrar el pasaporte.

“Se los mostré, el oficial lo puso en la computadora y me dijo que me estacionara y que fuéramos adentro. Cuando entramos, ellos preguntaron que si yo tenía una historia criminal y les dije que sí, y que de eso hace 37 años”, agregó el reverendo.

Explicó a los oficiales canadienses que al día de hoy es pastor y vive de dar conferencias para que la gente cambie y no caiga en el crimen. “El tipo me oyó y me pidió que me sentara y que dejaba saber ahora”.

Relató Sabino que se naturalizó ciudadano americano hace alrededor de un año y había estado antes tratando de entrar a Canadá, siendo impedido también hace 15 años entrando por barco a Toronto pero le aconsejaban que se quedara en el barco.

“Creí que por ser ciudadano de Estados Unido ya no había problemas, pero al consultar con un experto en migración, me dijo que Canadá no me va dejar entrar y van a haber naciones donde tampoco podré entrar aún con el pasaporte americano por mi pasado porque ya el mundo está diferente a antes”, añadió.

“Cuando yo entraba antes no estaba el tratado de la libre información pero ahora, todo el mundo está informado”, indicó añadió que también confrontó el mismo problema en Australia donde no lo dejaron entrar, España le negó una visa que se la repuso luego, en Perú no lo dejaron entrar por el aeropuerto, país al que había entrado la primera vez y todavía no era ciudadano americano cuando se le impidió las entradas a esos países.

El pastor señaló que además de las agencias de seguridad nacional de todos los países del mundo, la Policía Internacional (INTERPOL) mantiene su ficha.

Dijo que el alegato de inmigración de Canadá para impedirle la entrada es su récord en Estados Unidos.

Aclaró que no fue arrestado después de ser rechazado para entrar a Canadá y se mantiene en el hotel en Buffalo desde el miércoles de esta semana. “Estoy tranquilo en un hotel, solo a mí me impidieron la entrada”.

Le dieron papeles para que cuando regrese a Canadá lleve todos los documentos que prueban que su récord fue anulado en Estados Unidos impresos porque los tiene en el celular pero los oficiales de la CBSA no quisieron aceptarlos en versión digital.

“Lo que quisieron fue devolverme”, subrayó el reverendo.

“Me sorprendió especialmente con las relaciones diplomáticas de estas dos naciones, Estados Unidos y Canadá, pero a ellos no les importa en perdón sino que tengo tres casos por armas de fuego y ahí, eso no se acepta”, reveló Sabino.

Dijo que les mostró a los oficiales sus perdones federal y estatal de 1991 cuando fue perdonado y se anuló todo recurso de deportación en su contra.

Informó que después de ser perdonado por el gobernador Cuomo solicitó la ciudadanía y se la negaron pero se la concedieron aceptándolo como ciudadano americano.

Explicó que buscará asesoría adecuada para dar los pasos legales necesarios y desbloquear los impedimentos de entrada a otros países.

“Eso es un desaliento y un gasto de dinero”, subrayó el reverendo.

EL RECORD CRIMINAL

Sabino tuvo numerosos arrestos por armas de fuego y narcóticos, cuatro condenas por crímenes graves y tres sentencias en la cárcel, desde hace aproximadamente 38 años, aunque recibió el perdón federal del Juez Robert D. Weisel el 24 de julio de 1991 y el perdón estatal del gobernador Andrew Cuomo el 24 de diciembre de 2020 las autoridades decidieron no darle la entrada a Canadá.

“No me gusta esto y me siento muy mal que después de tanto tiempo, el periodo tenebroso me persigue aun después de 38 años dedicado al bien, pero entiendo”, dijo el pastor.

“Siempre les comparto a los jóvenes que tener un récord criminal es una de las más grandes fallas, eternos sufrimientos y pérdida de muchas oportunidades en la vida. El crimen nos daña a todos y en todo”, expresó.

“Sigo adelante, aunque en tres países se me niega la entrada a causa de mi pasado, Australia, Perú y ahora Canadá, a estos últimos dos, entré y prediqué la palabra de Dios hasta que sus departamentos de inmigración luego decidieran negarme la entrada”, relató.

“Pase lo que pase, ahora camino bajo el ritmo de otro tambor. Alguien me dijo y yo lo creo: Una vez, tú descubres quien tú eres, no importa lo que tú hayas sido”, indicó el pastor, uno de los predicadores hispanos en Estados Unidos con mayor liderazgo y respeto en las comunidades incluyendo a los jóvenes que profesan el cristianismo.