Gobierno de EEUU asume caso contra dominicana propietaria de guardería donde murió niño con nuevos cargos federales; eliminó más de 21 mil mensajes y alertó esposo

Miguel Cruz Tejada

NUEVA YORK._ El Gobierno de Estados Unidos a través de la Corte Federal del Distrito Sur con sede en Manhattan, asumió desde ayer martes el caso de la dominicana Grei Méndez de Ventura y el primo de su esposo prófugo, Carlisto Acevedo Brito con nuevos cargos federales que incluyen conspiración y muerte relacionada con el narco.

Los acusados fueron llevados a la corte federal e instruidos de los nuevos cargos del Gobierno ante la jueza Jennifer Willis que ratificó la prisión de ambos sin derecho a fianza decidida en la Corte Criminal en Manhattan el domingo.

El fiscal federal Damien Williams dijo que ella borró 21,526 mensajes y alertó con varias llamadas a su esposo antes de llamar al 911 para advertirle que las autoridades estaban en la guardería, lo que ayudó a que el marido, cuyo nombre no se ha revelado, pudiera escapar de la justicia.

El Ministerio Público presentó en el tribunal documentos judiciales que revelan que supuestamente ella borró los mensajes a su esposo y le avisó de que los policías lo estaban buscando.

Las acusaciones dicen que Grei de 36 años, propietaria de la guardería “Divino Niño Daycare” y Acevedo Brito, de 41, utilizaron la fachada del centro de cuidado infantil para encubrir su verdadera operación, una fábrica de fentanilo.

Pero mientras los policías buscaban el viernes en el centro después de la muerte del pequeño Nicholas Feliz Dominici, de 1 año que los inhaló el opioide letal, la mujer eliminó los 21,526 mensajes cifrados enviados entre marzo de 2021 y el 15 de septiembre de 2023.

Ella eliminó los mensajes mientras estaba sentada en el cuartel 52 en El Bronx donde esperaba para ser interrogada.

Cuando los investigadores recuperaron algunos de los mensajes eliminados, descubrieron que de Ventura le había dicho a su esposo que los policías estaban preguntando por él y que debería ir a buscar un abogado.

El horrible caso ha “conmocionado la conciencia de nuestra ciudad”, dijo el fiscal Williams en una conferencia de prensa anunciando los cargos ayer martes.

“Los traficantes de drogas que venden fentanilo o lo cortan en otras drogas sin el conocimiento de los compradores deben dejar de empujar este veneno”, agregó Williams. “Arruina vidas y arruinará las tuyas cuando te atrapemos, te condenemos y te pongamos en una prisión federal”, advirtió el funcionario.

Frank Tarentino, agente especial a cargo de la División de Nueva York de la DEA, dijo que todos los neoyorquinos deberían estar indignados tanto por el episodio de El Bronx como por el flagelo del fentanilo a nivel nacional.

“El fentanilo es un asesino”, dijo agregando que “el opioide sintético, que es 50 veces más fuerte que la heroína, ahora está en todo y en todas partes matando a las víctimas de manera instantánea e indiscriminada”.

Subrayó que el fentanilo es la amenaza más urgente en la nación.

Los policías que allanaron la guardería en el vecindario Kingsbridge en El Bronx encontraron un kilo de fentanilo encima de las colchonetas en las que dormían los niños, como varias prensas de kilos y dispositivos que generalmente se usan para combinar la droga con cocaína o heroína dentro de la instalación.

Otros tres niños menores de 3 años también fueron expuestos a la droga y siguen hospitalizados con lesiones graves como consecuencia de la conspiración de drogas de los acusados, dijeron los federales.

Los fiscales también revelaron que a medida que pasaban preciosos segundos después de la exposición de los niños a la droga asesina, de Ventura, al darse cuenta de que los menores no se estaban despertando de sus siestas, llamó a otra empleada de la guardería y a su esposo.

Volvió a llamar a su esposo después de hablar con un operador del 911.

Su esposo llegó antes de que aparecieran los policías, según las imágenes de vigilancia y aunque entró con las manos vacías, salió con lo que parecían dos bolsas de compras pesadas huyendo por un callejón.

El esposo sigue siendo activamente buscado.

“No hemos terminado”, dijo el fiscal. “Vamos a atraparlo. Esté atento a más sobre esto pronto”.

Los cargos presentados por los fiscales federales incluyen posesión con la intención de distribuir narcóticos que resultan en la muerte y conspiración para distribuir narcóticos que resultan en la muerte.

Vestida con un atuendo color canela de la cárcel, la dominicana estaba resoplando cuando compareció ante la jueza ayer martes por la noche y echó un vistazo a la segunda fila de los asientos de la sala judicial donde estaban su madre y su hija de 18 años, la mayor de sus cuatro hijos.

“¡Ay, no!” exclamó cuando la jueza ordenó que fuera detenida sin fianza, a la espera de una próxima comparecencia ante el tribunal a mediados de octubre, donde deberá presentar una declaración de culpabilidad o inocencia.

La jueza dijo que estaba de acuerdo con la Oficina del Fiscal de los Estados Unidos, que dijo que de Ventura, que no es ciudadana estadounidense pero es residente legal permanente, podría huir a la República Dominicana, donde tiene familiares, si fuera liberada con fianza.

“Su esposo ya ha huido, y no hay razón para creer que ella no lo haría también”, dijo el fiscal federal adjunto Brandon Thompson en representación del Ministerio Público.

El abogado de oficio de la dominicana Clay Kaminsky, argumentó que los mensajes eliminados de su teléfono podrían haber incluido fotos y textos íntimos que envió a su esposo.

También afirmó que la llamada que hizo a su esposo fue por solo 10 segundos y que podría haberlo hecho en un momento de pánico.

Kaminsky le pidió a la jueza que fijara una fianza no especificada, argumentando que su clienta no es un riesgo de fuga porque sus hijos viven en Nueva York y simplemente no hay razón para creer que los dejaría.

“Es un poco rico decir que ella dirigía una fábrica de fentanilo en una guardería”, afirmó. “No hay evidencia directa de que ella supiera o distribuyera los narcóticos”, sostuvo el defensor.

Mientras tanto, el abogado de Brito estuvo de acuerdo con la solicitud de los fiscales de prisión preventiva y también se ordenó que Brito permaneciera detenido sin fianza.

Tanto De Ventura como Brito ya han sido acusados por los fiscales del Bronx de asesinato por la muerte de Dominici, que según las autoridades ocurrió después de que el niño inhalara fentanilo que salió al aire cuando los adultos estaban cortando drogas para la venta.

Los otros tres niños enfermos, un par de niños de 2 años y una de sus hermanas de 8 meses, también fueron hospitalizados el viernes, con uno de los niños en estado crítico, dijo la policía.

El lunes, el alcalde Eric Adams dijo que los tres menores fueron salvados con Naloxona, el medicamento para revertir la sobredosis conocido por su nombre de marca “Narcan”.

Grei y Brito enfrentan cadena perpetua si son declarados culpables de los cargos.