Yunior Espinosa plantea suspender el financiamiento privado a partidos ante vínculos con corrupción y narcotráfico

Yunior Espinosa afirmó que los recientes escándalos de corrupción y narcotráfico que salpican a la política dominicana evidencian la urgencia de suspender el financiamiento privado a los partidos políticos, como vía para sanear la actividad política y recuperar la credibilidad institucional. A su juicio, el problema no radica en expresiones sociales transitorias como Marcha Verde, sino en fallas estructurales del sistema político y en la forma en que se financian las organizaciones partidarias.

Espinosa sostuvo que Marcha Verde fue un fenómeno político-social coyuntural que ya desapareció y que no puede responsabilizarse de la salida del PLD del poder, la cual —según explicó— obedeció a una combinación de ambición interna, escándalos de corrupción de alcance internacional y la crisis electoral de febrero de 2020. Consideró que el principal aporte de ese movimiento fue sacar el tema de la corrupción del ámbito interno de los partidos y colocarlo en el centro del debate público.

En su análisis, señaló que el financiamiento privado convierte la política en una actividad de inversión, donde quienes aportan recursos no lo hacen de manera altruista, sino con la expectativa de recuperar su dinero mediante contratos, privilegios o favores desde el Estado. Advirtió que esta lógica no solo opera con capitales lícitos, sino también con fondos provenientes de actividades ilícitas, lo que facilita la infiltración del crimen organizado y del narcotráfico en las estructuras partidarias y en los cargos electivos.

El comentarista cuestionó que los funcionarios respondan más a quienes financian sus campañas que a los votantes, y criticó el alto costo de los procesos electorales, que —afirmó— no se corresponde con los montos oficialmente reportados. Finalmente, reiteró su llamado a eliminar temporalmente el financiamiento privado y limitar las campañas a recursos públicos, como única forma de reducir la plusvalía de la política, fortalecer la democracia y frenar la captura del Estado por intereses económicos y criminales.