Ramón Santos analiza los desafíos y oportunidades para la agropecuaria dominicana en el contexto actual

Ramón Santos expresó su preocupación por las múltiples dificultades que enfrenta el sector agrícola, en especial la escasez de mano de obra y los retos económicos. Santos, conocido por su vasta experiencia en el campo, reflexionó sobre la evolución de las políticas agropecuarias y el impacto de las decisiones históricas en la producción agrícola del país.

Uno de los temas más relevantes en su análisis fue el legado del Partido Revolucionario Dominicano (PRD) y la transición a lo que hoy se conoce como el Partido Revolucionario Moderno (PRM). Santos recordó cómo el gobierno de Juan Bosch, que originalmente impulsó la construcción de la presa de Taveras, fue derrocado a solo siete meses de tomar el poder. Además, destacó que varios presidentes del PRD, incluidos Antonio Guzmán y Salvador Jorge Blanco, no lograron consolidar un legado agrícola, debido a tensiones políticas internas y falta de continuidad.

“Es fundamental que Luis Abinader, el primer presidente del PRM que logró la reelección, sea capaz de dejar un verdadero legado para el campo dominicano”, expresó Santos. Sin embargo, añadió que, a pesar de las dificultades, la clave para el futuro del sector agropecuario radica en la mecanización y tecnificación de los procesos agrícolas, algo que aún es limitado en la República Dominicana, dada la falta de grandes llanuras y las particularidades de la geografía local.

Santos también abordó el papel de la inmigración haitiana en la agroindustria, señalando que, si bien los haitianos han sido una parte crucial de la fuerza laboral agrícola, el país enfrenta problemas derivados de la sobrepoblación y la integración de estos trabajadores en la sociedad. En ese sentido, destacó la importancia de implementar un sistema de identificación para los haitianos en el país, lo cual permitiría regularizar su estatus y contribuir al orden social.

La agropecuaria dominicana, según Santos, no solo requiere un enfoque de modernización tecnológica, sino también una solución equilibrada que contemple la educación y la capacitación de la mano de obra, tanto local como extranjera. Aunque existen desafíos, Santos subrayó que el país cuenta con los recursos para avanzar si se adoptan estrategias sensatas y se asegura la inclusión de expertos en la toma de decisiones.