Persio Maldonado: “La libertad de expresión no permite destruir la dignidad de otros”
El periodista Persio Maldonado, director de El Nuevo Diario y presidente de la Sociedad Dominicana de Diarios, advirtió que la libertad de expresión no debe confundirse con el derecho a calumniar, injuriar o extorsionar. En una amplia entrevista, Maldonado defendió el respeto a la dignidad humana como pilar del ejercicio democrático de la comunicación y pidió actualizar el marco legal para enfrentar los retos del ecosistema digital.
Al referirse al reciente comunicado del Ministerio Público que denuncia la existencia de redes de extorsión en medios digitales, Maldonado señaló que no se trata de simples casos de difamación. “Cuando hablamos de extorsión estamos hablando de delitos, no de opiniones”, afirmó. Indicó que la libertad de expresión implica consecuencias cuando se traspasan los límites del respeto, y que los comunicadores no pueden alegar impunidad bajo la excusa del periodismo.
Llamó la atención sobre la vigencia de la ley 6132, adoptada desde 1962 y basada en una norma francesa de 1881, como marco regulador del periodismo en la era digital. “Es una ley doblemente vieja, que no responde al nuevo ecosistema comunicacional”, expresó, abogando por una legislación moderna que garantice derechos pero también establezca responsabilidades claras.
En su rol institucional, Maldonado ratificó que la Sociedad Dominicana de Diarios respalda la creación de una nueva ley de medios que distinga entre periodismo ético y prácticas ilegales disfrazadas de comunicación. “Una cosa es el ejercicio legítimo de la opinión, y otra es utilizar un medio para chantajear, manipular o destruir reputaciones sin pruebas”, insistió.
Asimismo, criticó el asistencialismo estatal, la lentitud judicial ante demandas por difamación o extorsión, y la falta de consecuencias legales efectivas. “Una democracia no puede funcionar si los ciudadanos no tienen respuesta cuando son agraviados públicamente”, enfatizó.
Maldonado también abordó temas de coyuntura como la reforma fiscal, la institucionalidad democrática y la crisis haitiana. Aplaudió la reunión del presidente Abinader con expresidentes para consensuar una política de Estado sobre Haití, y reiteró que “la situación haitiana es más nuestra que de ellos mismos”.
Finalmente, defendió el rol de los medios tradicionales como garantes de una democracia sólida y denunció que parte de los recursos estatales están financiando plataformas digitales que operan al margen de la ética. “Es tiempo de redefinir el marco normativo de la comunicación en función del respeto, la legalidad y el bien común”, concluyó.