Mi posición II
Hay que reflexionar que el mundo va por la tercera generación de derechos, aunque algunos autores plantean que estamos en la quinta generación de derechos mientras el país sigue atascado en la primera generación de derechos básicos. Lo que auspicia un sentimiento colectivo de frustración sobre todo entre los empresarios, la gente trabajadora que produce riqueza, que otorga empleos y paga cada día más impuestos. Que ve el comportamiento de la clase política y rechaza la práctica de apropiarse y malgastar el dinero del presupuesto nacional. Por eso vemos cómo empresarios importantes participan en política para propiciar reformas que encaminan a sus países por la senda de la prosperidad.