¿Qué busca realmente Trump con su política migratoria?
Estados Unidos ha reanudado los vuelos de deportación a Venezuela, marcando un cambio significativo en su política migratoria. Según la experta en asuntos migratorios Karina Pérez, esta medida es parte de una estrategia más amplia impulsada por la administración de Donald Trump, que busca endurecer los controles fronterizos y reducir la inmigración irregular.
En los primeros 50 días de la administración Trump, se han deportado 32,809 personas, de las cuales 14,011 eran criminales convictos, 9,980 tenían cargos pendientes en la corte y 1,555 eran miembros de pandillas. Además, se han arrestado 39 sospechosos de terrorismo. Estas cifras reflejan una política de inmigración más estricta y selectiva, orientada a la seguridad nacional.
Uno de los cambios clave en la normativa es la eliminación del Estatus de Protección Temporal (TPS) para haitianos y venezolanos, lo que afectará a miles de personas que habían residido en el país bajo esta protección. Asimismo, el gobierno ha implementado un nuevo requisito de registro para inmigrantes que permanezcan más de 30 días en EE.UU., lo que implica la toma de huellas dactilares y fotografías. Quienes no cumplan con este requisito podrían enfrentar multas de hasta 5,000 dólares y penas de prisión de hasta seis meses.
Karina Pérez señala que la aplicación de estas políticas ha reducido drásticamente los arrestos en la frontera, lo que sugiere que las restricciones están teniendo un efecto disuasorio. Sin embargo, también plantea interrogantes sobre el destino de los migrantes deportados, en especial aquellos enviados a países en crisis como Haití.
La experta cuestiona por qué países como República Dominicana no adoptan medidas similares para regular la inmigración y controlar la entrada de personas sin estatus legal. “Alguien se está beneficiando del desorden”, concluye, sugiriendo que el caos migratorio puede ser intencional en algunas naciones.
El impacto de estas políticas a largo plazo está por verse, pero lo cierto es que la administración Trump ha reafirmado su postura de endurecimiento migratorio, lo que podría influir en el panorama político y social de Estados Unidos en los próximos meses.